A través de la siguiente comparativa quiero plantear y transmitir una inquietud que me ha superado tras la polémica sentencia de La Manada: ¿Es posible que, incluso en aquello que debería unirnos y diluir las fronteras ideológicas, estas se impongan? ¿Tan profunda es la programación política partidista, que anteponemos su corporativismo a los valores humanos?
Mientras que unos se indignan con mayor o menor "visceralidad", señalan el machismo latente en una buena parte de la sociedad o ponen sobre la mesa la idea de que la justicia no es infalible; otros ponen el objetivo en la reacción de la sociedad señalándola de extrema, tachan de irresponsable a los políticos que muestran su indignación, exigen respeto por la sentencia con desafecto a la víctima, e incluso barajan la inocencia de los condenados.
Esto queda excepcional y perturbadoramente de manifiesto en medios de (extrema) derecha como Alerta Digital y La Gaceta, los cuales son la definición en si misma del sectarismo político (basta con decir que se criminaliza a la víctima con bastante vehemencia, se crítica y se tacha de iracunda la actitud de las feministas, y prácticamente se reprocha a la mayoría de la sociedad su postura, ironizando con que todos son abogados y jueces). Sencillamente, tal disociación moral da miedo, y hace que uno se pregunte dónde está el límite y hasta dónde nos llevaría intentar vislumbrarlo.
Pero vayamos a la tarea que realmente nos ocupa —pido disculpas por la anterior "parrafada"—, que no es otra que comparar el tratamiento que recibe la susodicha noticia por parte de la edición digital de dos diarios. No obstante, me centrare en medios más generalistas a fin de hacer este ejercicio digerible (lo contrario sería demasiado fácil). Es por ello que haremos la comparativa entre El Mundo (centro-derecha) y El País (centro-izquierda), para observar cómo, dada la peculiar naturaleza del asunto, ambos mantienen posturas relativamente objetivas al cubrir las 7 cuestiones clave de toda noticia; aunque con matices que dejan entrever que la tendencia ideológica termina imponiéndose, incluso en la susodicha situación.
La primera diferencia la encontramos es la extensión de la noticia (casi 1300 palabras le dedica El País, mientras que El Mundo no llega a las 800); eso en cuanto a la noticia en sí, pues El Mundo alarga su entrada incluyendo una cronología (alrededor de 300 palabras) de los hechos según la acusación de la Fiscalía.
La primera diferencia la encontramos es la extensión de la noticia (casi 1300 palabras le dedica El País, mientras que El Mundo no llega a las 800); eso en cuanto a la noticia en sí, pues El Mundo alarga su entrada incluyendo una cronología (alrededor de 300 palabras) de los hechos según la acusación de la Fiscalía.
En segundo lugar, observamos un enfoque diferente en sus respectivos titulares; mientras que El Mundo titula "Sentencia de La Manada: condenados a nueve años por abusos, pero absueltos de agresión sexual", El País titula "La Manada se libra de la violación" y subtitula "La Audiencia Provincial de Navarra condena a los cinco acusados a nueve años de cárcel por abuso sexual continuado". Resulta obvio que El Mundo se muestra cauteloso yendo a lo concreto, mientras que El País muestra cierta disconformidad, e incluso indignación, al usar la expresión "se libra de".
Ambos medios encabezan la noticia con vídeos: El País lo hace con uno de 52 segundos en el cual resume la misma, y pone el punto de mira sobre la pretensión de absolución del voto particular; mientras que El Mundo lo hace con un montaje de 1.30 minutos dedicado a la lectura de la sentencia, remarcando el castigo dado. Parece evidente que, una vez más, la postura de El Mundo es reveladoramente “cautelosa”.
En el cuerpo de las respectivas noticias, observamos que El Mundo incluye otro vídeo de 3.02 minutos a la mitad del artículo, repasando toda la información difundida hasta la fecha; El País, por su parte, opta por un cuadro de texto en el que da voz a la victima, acercándonos a una parte significativamente emotiva de su declaración.
Esa "frialdad objetiva" de El Mundo se mantiene a lo largo de toda la noticia, al tiempo que, en general, se limita a exponer los hechos encadenando citas de la sentencia; se queda en la superficie, a diferencia de El País, el cual no solo se vale de un enfoque más humano, sino que se adentra en cuestiones que no son tratadas por medios más reservados, conservadores.
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